Paro febrero 2022

Los datos publicados hoy sobre el paro registrado del mes de febrero reflejan la gran incidencia positiva de la reforma laboral en el mercado de trabajo de nuestro país, con un crecimiento récord de la contratación indefinida. De hecho, gracias a esta reforma, se han impulsado los contratos indefinidos hasta casi el 22% del total, multiplicándose por más del doble respecto a 2021, un dato que para UGT debe seguir aumentando paulatinamente, hasta consolidarse. 

Tanto la estadística del paro como la de la afiliación a la Seguridad Social reafirman la positiva evolución del empleo desde mayo del pasado año, consecuencia de la reactivación de la actividad. Es la mayor caída del paro registrado en un mes de febrero desde 2015. Además, Se acelera la creación de empleo en términos anuales por quinto mes consecutivo, del 4,2% al 4,5%.

En este positivo contexto aparecen dos elementos de preocupación, de muy distinta naturaleza. De un lado, la calidad del empleo generado, marcado tradicionalmente por la precariedad laboral en nuestro país, con mucha incidencia del empleo temporal, el subempleo y los bajos salarios. De otro lado, la agresión de Rusia a Ucrania, que ha abierto un conflicto de incalculables consecuencias en todos los ámbitos. 

Para atacar el primer problema se ha introducido la reforma laboral aprobada a finales del pasado año, fruto del acuerdo del gobierno con los interlocutores sociales. Aunque muchas de sus medidas aún no han entrado en vigor (lo harán en abril), sí resulta muy destacable en estos primeros meses el aumento del peso de la contratación indefinida sobre el total, como hemos comentado. La reforma laboral está atajando la precariedad laboral y la temporalidad y está aumentando los empleos dignos y de calidad. 

Los salarios en convenio tienen que crecer

En relación a la precariedad salarial que caracteriza la actividad productiva en nuestro país, que es incompatible con un crecimiento económico robusto y sostenible, UGT destaca la aprobación del aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 1.000 euros, que se aplicará con carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2022, y que mejora las condiciones de vida de las personas que se encuentran en las posiciones más desfavorables de la escala salarial, beneficiando a en torno a 2 millones de personas.  

Sin embargo, los salarios en convenio no están creciendo de manera acorde a la situación económica. En el primer mes de 2022 se ha pactado una subida salarial del 2% de media, muy inferior al 7,4% de aumento anual del IPC en febrero. Estos valores están muy por debajo de lo necesario ante la escalada de precios que se está produciendo y ante las necesidades de crecimiento económico para dejar atrás definitivamente la crisis pandémica. La recuperación no será posible si los trabajadores y las trabajadoras pierden de nuevo, como ya sucediera en 2021, poder adquisitivo. 

En este escenario, de indudable bonanza económica, pero marcado de manera determinante por la necesidad de afianzar la reconstrucción económica y por la incertidumbre provocada por la guerra en Ucrania, desde UGT consideramos fundamental que la patronal y los sindicatos alcancemos un nuevo Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva donde se fije una hoja de ruta común, con criterios adecuados para todos los convenios colectivos, teniendo en cuenta las especiales circunstancias actuales, lo sucedido en 2021 y las particularidades de los sectores en los que se desarrolla su actividad. La capacidad de adaptación y un marco estable de negociación serían claves para aumentar y mejorar el empleo de calidad en el futuro inmediato. 

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