► UGT defiende en la negociación sobre prolongación de los ERTES la preservación de los derechos, alcanzados en los dos acuerdos anteriores, como el contador a cero, para que no se merme la protección por desempleo de las personas trabajadoras afectadas y que los ERTES se mantengan en todas las empresas y actividades donde sea necesario, mientras dure la pandemia.

► Al mismo tiempo, exigirá cambiar la actual normativa para que no haya una merma en las cuantías de los ERTES, una vez transcurran 6 meses.

► El sindicato considera que hay que evitar una visión cortoplacista de las medidas, fundamental para generar la certidumbre que necesitan empresas y personas trabajadora, insiste en conocer la dotación económica prevista para las medidas y, también, en dar solución a los problemas que se generan en la atención y cuidado de las responsabilidades familiares más allá del PLAN MECUIDA.

► El objetivo debe seguir siendo no dejar a nadie atrás. 

UGT quiere aclarar que el documento remitido por el Gobierno sobre los ERTES es un borrador que debe continuar negociándose y, por lo tanto, en ningún caso está cerrado y que, en este proceso de negociación, UGT va a defender mejoras, no retrocesos en la protección de los trabajadores y trabajadoras.

En este sentido, el sindicato considera muy buen punto de partida los dos acuerdos alcanzados anteriormente sobre esta materia. 

Las circunstancias especiales provocadas por la Covid 19 han obligado a adoptar medidas también excepcionales en relación con los ERTES, que no pueden decaer, como el llamado “contador a cero”, un derecho que se introdujo para que las prestaciones de los ERTE no computaran de cara a futuras prestaciones de desempleo. Por tanto, UGT defenderá que esta medida no se elimine mientras persista la pandemia. Lo contrario, será mermar la protección de los trabajadores y trabajadoras afectados por ERTE.

Al mismo tiempo, UGT defiende el mantenimiento de la cuantía de las prestaciones y que no se reduzca cuando se cumplan 6 meses, pasando de cobrar el 70% de la base reguladora, al 50%. Esto exige un cambio en la normativa actual que debería recogerse en el documento definitivo que ahora mismo se está negociando.

Por otro lado, el sindicato también ha dejado muy clara su postura sobre la extensión y prolongación de los ERTES. Estos se deben prolongar en las empresas y actividades que lo requieran y el tiempo que sea necesario, mientras dure la pandemia, si no se quiere dejar a nadie atrás. 

Por tanto, UGT rechaza la llamada “protección diferencial”, que no es otra cosa que focalizar la prórroga de los ERTES por sectores o actividades, pero que no protege a todas las empresas que se tienen que acoger a ERTE y al conjunto de trabajadores y trabajadoras afectados.

El sindicato quiere poner en valor el esfuerzo que ha hecho el Gobierno y los agentes sociales para llegar a acuerdos consensuados en el marco del diálogo social y confía en que esta nueva negociación llegue de nuevo a un acuerdo que vele por los intereses de todos. 

Aunque UGT entiende las limitaciones presupuestarias, cree que hay anteponer prioridades y la principal debe ser preservar y mantener el empleo, garantizar la protección de los trabajadores y trabajadoras y evitar el cierre de empresas mientras dure la pandemia.

En definitiva, el sindicato está incidiendo en la necesidad de proteger a todos los trabajadores con independencia del sector al que pertenezcan, en evitar una visión cortoplacista de las medidas -fundamental para generar la certidumbre que necesitan empresas y personas trabajadoras-, en conocer la dotación económica prevista para las medidas y, también, en dar solución a los problemas que se generan en la atención y cuidado de las responsabilidades familiares más allá del PLAN MECUIDA.

UGT entiende que se debe aprobar un acuerdo amplio, que no deje a nadie atrás y que cualquier modificación que hubiera que hacer, conforme evolucione la pandemia, se evalúe y apruebe en el marco de la Comisión de Seguimiento Tripartita Laboral.