El plan integral de apoyo a la familia debe dotar de una perspectiva familiar todas las políticas del Gobierno
Fecha: 14 May 2015
UGT espera que el plan integral de apoyo a la familia, que se aprueba en el día de hoy por el Consejo de Ministros, asuma el compromiso del Ejecutivo de articular políticas reales de apoyo a las familias y responda a las recomendaciones del Consejo de Europa dirigidas a desarrollar la educación y los cuidados de la primera infancia o establecer estrategias de acceso para los padres y madres al mercado laboral, entre otras cuestiones.
El sindicato confía en que el plan no sea una recopilación de medidas ya existentes y se dote de una perspectiva familiar todas las políticas del Gobierno, con el fin de garantizar una protección y un trato igualitario en todas las políticas y actuaciones públicas de manera transversal y conseguir así que las familias no se vean abocadas a situaciones de pobreza y exclusión social, como ocurre en la actualidad.
Hoy el Consejo de Ministros aprueba el plan integral de apoyo a la familia, promesa del Partido Popular que se ha ido demorando en el tiempo desde los anuncios iniciales de tan esperado plan.
Desde la Unión General de Trabajadores, esperamos que el citado plan asuma el compromiso del Gobierno de articular políticas integrales de apoyo a las familias y responda a las recomendaciones efectuadas por el Consejo de Europa dirigidas a desarrollar la educación y los cuidados de la primera infancia, establecer estrategias que permitan el acceso a los padres y madres al mercado laboral, además de que las familias deben disponer de una renta adecuada y el acceso a los servicios básicos.
Hasta ahora las políticas dirigidas a la familia han sido escasas y desde luego no han tenido una concepción integradora y transversal, más bien todo lo contrario, se han realizado políticas muy parceladas, además de que las políticas generales no han favorecido a la familia, en un escenario de recortes económicos y de derechos laborales y sociales donde cada vez se limita la capacidad económica de las familias.
Las medidas de apoyo a la maternidad y paternidad, y las relativas a la conciliación de la vida familiar y laboral hasta ahora, se han alejado del cumplimiento del principio de igualdad de género cuya consecuencia más inmediata es un retroceso para la igualdad de la mujer en el ámbito laboral.
Desconfiamos que con este Plan se dote de una perspectiva familiar a todas las políticas del Gobierno, y tememos que estemos ante una recopilación de las medidas actuales, donde se aglutine todas las políticas destinadas a las familias que ya existen, sin que suponga ninguna novedad ni, lógicamente, ningún incremento presupuestario, tales como las iniciativas tributarias en vigor desde enero con la reforma fiscal dirigidas a incentivos de familias numerosas o la bonificación de autónomos con jornada reducida.
Por tanto, el sindicato espera que la partida presupuestaria asignada, de 5.526 millones de euros, suponga un incremento real en las políticas destinadas a las familias y no sean un sumatorio de líneas estratégicas donde ya se vienen dedicando asignaciones económicas.
Recordemos que la directriz del Gobierno a la hora de elaborar los Presupuestos Generales del Estado ha sido la reducción masiva de las partidas sociales. En los que respecta a la familia, los créditos destinados a la atención a la infancia y las familias descendieron, del año 2011 a 2014, un 46,35%.
Para UGT, en primer lugar, se debe garantizar una protección y un trato igualitario en todas las políticas y actuaciones públicas de manera transversal que contemple a todos los modelos de familia. La protección a la infancia en un momento como el actual, debe de garantizar recursos y servicios públicos como la educación o la sanidad, tiene que prevenir situaciones de desahucio con menores, así como la pobreza de las familias en su forma más severa que impide cubrir sus necesidades más básicas.
La conciliación de la vida laboral y personal tiene que garantizarse a través del incremento de las escuelas infantiles y servicios de atención. Hablar de políticas familiares es también hablar de la protección a la dependencia, cuyas políticas asisten cada año a una importante reducción presupuestaria así como una rebaja en la intensidad de las prestaciones.
Para el sindicato, las políticas familiares deben garantizar que las familias que no tengan ingresos se les aseguren unos recursos para atender sus necesidades esenciales. Es preciso dar una respuesta urgente a todas las familias que se encuentran en esta situación, de modo que no se vean abocados a situaciones de pobreza y exclusión social.
Existe una obligación social que exige ampliar y completar los sistemas de protección social poniendo en marcha un nuevo ámbito que implique la garantía de ingresos mínimos a todas las personas carentes de recursos. Para ello se debe crear una Prestación de Ingresos que asegure unos recursos mínimos y se garantice el acceso a la protección social a las personas que a día de hoy no está siendo protegidas por ninguna prestación.