La reforma laboral ha mejorado drásticamente la calidad del empleo

El empleo crece en el año, pero aún son necesarios cambios de calado en las Políticas Activas de Empleo y actuaciones para mantener la actividad económica y el poder adquisitivo de los salarios


Los datos de la EPA del cuarto trimestre de 2022 muestran dos cuestiones: por un lado, el impacto de la desaceleración económica actual en el mercado de trabajo, en un contexto muy complicado; y por otro, que se mantiene la continua mejora de la calidad del empleo inducida por la última reforma laboral, que está cambiando a mejor el paradigma de contratación en nuestro país. En todo caso, el número de personas ocupadas sigue creciendo a un ritmo anual del 1,4%, lo que supone 278.900 personas más. Y en lo que respecta a la temporalidad, la tasa se sitúa en el 17,9%, 7,5 puntos porcentuales menos que hace un año. 

En resumen, el comportamiento del mercado laboral en 2022 medido por la EPA arroja unos resultados favorables, sobre todo teniendo en cuenta que el conflicto bélico en Ucrania trastocó todos los pronósticos sobre crecimiento económico y del empleo. Pronósticos como el que hizo Funcas en enero de 2022, que estimaba que el PIB iba a crecer en dicho año un 5,6% y que la tasa de paro se iba a situar en el 14,0%. Inmediatamente después del shock que supuso la invasión, la previsión del PIB se redujo a un 4,2%, mientras que la tasa de paro mejoró su previsión, cifrándose en un 13,8%, algo que se debe a la fortaleza que mostraba el empleo frente a la incertidumbre, gracias en gran parte a la reforma laboral. 

En global, la ocupación también ha aumentado, y en los datos de contratación que ofrece el SEPE se aprecia que prosigue el cambio de tendencia siendo el contrato indefinido ahora mucho más habitual. Aproximadamente, cuatro de cada diez contratos son indefinidos, cuando antes la media era de apenas uno de cada diez. Este incremento también se ha observado en la EPA, donde en el cuarto trimestre de 2022 hay 1.591.100 asalariados indefinidos más que en el mismo trimestre del pasado año (12,6% más), mientras que los temporales se han reducido en 1.193.800 (-27,7%). Por su parte, la tasa de paro se ha rebajado también, pasando de 13,3% en el cuarto trimestre de 2021 a un 12,9% en el de 2022. Con este dato, el promedio de la tasa de paro de este año es el más bajo desde 2008. 

Estos datos de la EPA completan la imagen del conjunto de 2022, evidenciando que la calidad y cantidad en el empleo en España es mejor ahora que antes de la reforma laboral. No obstante, el mercado laboral adolece todavía muchos problemas que requieren soluciones. Uno de ellos es el paro de larga duración, que en este último trimestre se ha situado en un 42,4%, lo que implica que casi uno de cada dos parados lleva más de un año buscando empleo. 

Hay que afrontar aún muchas debilidades del mercado laboral 

Pese a que este porcentaje se ha reducido ligeramente, en 5,8 puntos porcentuales respecto al año anterior, sigue siendo un problema latente, y, por desgracia, la Ley de Empleo recientemente aprobada no va a suponer un cambio de 180 grados en primer lugar, porque no se ha basado en el diálogo social, pero, además, porque no introduce unas Políticas Activas de Empleo a la altura de las necesidades de las personas paradas de larga duración. 

Otro de los retos es la regulación del coste de despido en España, por ello UGT presentó una demanda en Europa y, mientras es resuelta, espera poder negociar próximamente con el Gobierno para que estos costes sean justos y dignos.
En definitiva, el empleo ha mostrado signos indiscutibles de mejora, pero sin alcanzar sus condiciones óptimas, para lo que hace falta introducir cambios de calado en la Políticas Activas de Empleo, así como un apoyo decidido a las políticas fiscales que se orientan a mantener la actividad económica y el poder adquisitivo de las personas con menos recursos en un momento en el que la inflación sigue siendo un problema importante. 

Datos de interés

El INE ha publicado hoy los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondientes al cuarto trimestre de 2022, donde se observa un descenso de la ocupación y un aumento del número de personas desempleadas respecto al trimestre anterior. 

El paro ha aumentado en este trimestre en 43.800 personas (1,5%), lo que implica que hubo 3.024.000 personas paradas en dicho periodo. En consecuencia, la tasa de paro ha aumentado moderadamente hasta el 12,9% (21 centésimas más que el trimestre anterior). Esta tasa ha descendido 45 décimas si lo comparamos con el mismo periodo de 2021. Además, el número de parados de larga duración ha aumentado tras dos trimestres consecutivos de bajadas, contabilizándose 1.282.800 personas que llevan buscando empleo más de un año, es decir, lo que supone el 42,4% del total de desempleados, dos décimas más que en el trimestre anterior. 

En términos de ocupación, se registra un descenso de 81.900 personas ocupadas en este trimestre, un 0,4% menos. En total, hubo 20.463.900 personas empleadas, un 1,4% más que las contabilizadas en el mismo trimestre del año anterior. Por edad, el empleo crece únicamente en los grupos de 20 a 24 años, de 40 a 44 años y de 50 a 54 años este trimestre mientras que desciende en el resto. En cuanto a la evolución por ramas productivas, la ocupación aumenta exclusivamente en el sector de la agricultura (24.200 ocupados más). El sector servicios (70.100 menos), la construcción (28.000 menos) y la industria (8.000 menos) recogen caídas de la ocupación. 

En lo que respecta a la calidad del empleo, en este trimestre el empleo estable, indefinido y a tiempo completo sigue creciendo, mientras que la temporalidad continúa descendiendo. Los asalariados con contrato indefinido se incrementan en 366.100 en este trimestre, alcanzando las 13.890.800 personas, el dato más alto registrado en la serie histórica. Por su parte, las personas con contrato temporal se reducen en 397.800, descendiendo la tasa de temporalidad en 2,3 puntos y situándose en un 17,9%. En todo 2022 se han sumado 1.591.100 personas con contrato indefinido, a la vez que las personas con contrato temporal se han reducido en 1.193.800. 

En cuanto al empleo a tiempo completo, éste ha descendido en 241.500 personas este trimestre. Por otro lado, aumenta el empleo parcial en 159.600 personas este trimestre, pero disminuya la parcialidad involuntaria al 49,6%, lo que quiere decir que la mitad de las personas trabajadoras a tiempo parcial lo son únicamente por no encontrar trabajo a jornada completa. No obstante, en el empleo indefinido a tiempo completo se observa nuevamente un incremento, concretamente se han sumado 210.200 personas este trimestre, alcanzando una cifra total de 12.558.400 ocupados, el nivel más alto registrado en la serie estadística. Cabe señalar que este empleo lleva desde el primer trimestre de 2021 creciendo, pero desde la introducción de la reforma laboral lo hace a un paso mucho más acelerado. Mientras que en 2021 sus incrementos rondaban de media las 130.000 personas por trimestre, en 2022 este promedio asciende a 315.000 aproximadamente. 

Por último, los hogares con todos sus miembros activos en paro aumentan en 70.100 durante este cuarto trimestre, un 7,2% menos respecto al trimestre anterior. Por lo tanto, todavía siguen en esta circunstancia total de 1.047.500 hogares, lo que exige que siga apostándose por la creación de empleo de calidad para revertir esta situación.
 

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Fuente: UGT