UGT insta al Gobierno a adoptar medidas, con urgencia, y desde el consenso, para garantizar el presente y futuro de las pensiones
Fecha: 23 Ago 2017
UGT insta al Gobierno a que demuestre su voluntad real de negociación y adopte medidas, desde el consenso, y con urgencia para garantizar el presente y futuro de la Seguridad Social. En este sentido, denuncia que para avanzar en el diálogo social y político en esta materia es preciso que derogue las reformas impuestas y adopte políticas para incrementar los ingresos del sistema de Seguridad Social (SS), no para endeudarlo aún más.
El Ejecutivo, tras esquilmar el Fondo de Reserva, ha vulnerado la Ley General de la SS con el crédito concedido a dicho Fondo (un préstamo con cargo a los PGE, en lugar de que el Estado realice las transferencias oportunas, tal y como contempla la ley), a la vez que mantiene bonificaciones y ayudas a los empresarios con cargo a la Seguridad Social.
UGT recuerda que del 30 de septiembre al 9 de octubre habrá marchas de los jubilados desde distintos puntos de España y que confluirán en Madrid, para exigir medidas que garanticen el presente y futuro de las pensiones y que éstas sean dignas y se revaloricen conforme al coste de la vida.
UGT reclama responsabilidad al Gobierno para que impulse el Pacto de Toledo y el diálogo social en materia de pensiones y establezca políticas consensuadas y urgentes para garantizar el presente y futuro del Sistema de Seguridad Social. Para ello, es necesario que muestre su voluntad de acuerdo y derogue las reformas y políticas impuestas que ponen en riesgo el Sistema y castigan a los pensionistas a una pérdida continua de su poder adquisitivo (ello exige derogar la reforma de pensiones de 2013 y otras medidas que han contribuido a recortar el gasto y cumplir con los objetivos de déficit a costa de nuestros mayores).
El sindicato considera que el sistema de Seguridad Social no tiene un problema de gastos (gastamos menos que Francia, Italia o Alemania, en torno a 3 o 4 puntos), sino de ingresos y la falta de ingresos está directamente relacionada con la caída de las cotizaciones sociales que aportan los trabajadores. La tasa de desempleo en nuestro país todavía se sitúa en el 17,22% (según los últimos datos de la EPA) pero es que además el empleo que se crea es cada vez más temporal y precario y continúa la devaluación salarial, a causa de la reforma laboral de 2012 impuesta por Gobierno del PP.
Algunas propuestas de UGT
UGT recuerda sus propuestas para atajar el déficit de la Seguridad Social en el corto plazo: acabar con las bonificaciones a la contratación de las empresas con cargo a la SS; financiar los gastos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social desde los PGE (como el resto de los ministerios) y no desde el propio sistema, y destopar las bases de cotización, porque es injusto que anualmente el sistema de bases de cotización y pensión máxima establecidos dejen millones sin cotizar. Tres medidas que ahorrarían 15.500 millones de euros a la Seguridad Social y podrían acabar con su déficit, que el Gobierno del PP ha ido aumentando durante estos años con sus políticas. Medidas que el sindicato ha pedido que se debatieran, cuanto antes, en el seno del Pacto de Toledo.
Más allá de estas medidas, sería necesario para restablecer el equilibrio financiero del sistema, y siempre en el marco del Pacto de Toledo, la revisión inmediata de las fuentes de financiación. UGT considera que es necesario que el sistema de pensiones, sin excluir a ninguna pensión, se financie no solo con cotizaciones sino con impuestos. Se trata de crear una cesta de impuestos, de carácter finalista, que permitiera además alimentar el Fondo de Reserva.
Asimismo, el sindicato defiende que las pensiones se vuelvan a revalorizar conforme al coste de la vida.
El Fondo de Reserva de la Seguridad Social esquilmado
El Ejecutivo solicitó un crédito de 10.200 millones de euros, con cargo a los Presupuestos Generales del Estado de 2018 para pagar las pensiones en verano, sin agotar el Fondo de Reserva, porque no quiere decir públicamente que ha acabado con este Fondo. Con esta medida ha vulnerado la Ley General de la Seguridad Social, que dispone que la diferencia entre ingresos y gastos del sistema se debe hacer mediante transferencias del Estado y no a través de créditos, que lo que hacen es endeudar más a la Seguridad Social. Una medida errónea que, de nuevo, ha aprobado sin contar con nadie, vulnerando el diálogo social.
UGT ha mostrado, además, su rechazo a las nuevas medidas propuestas por el Ejecutivo, como la tarifa plana de autónomos, que se vuelve a cargar sobre el sistema de la Seguridad Social. Aunque el Gobierno se comprometió a acabar con este tipo de políticas, que aumentan más el déficit de la Seguridad Social, en la práctica sigue apostando por ellas. El resultado es un endeudamiento sin fin al sistema.
Por qué hay que derogar la reforma de 2013
Es vital revalorizar las pensiones y suprimir los dos mecanismos que estableció la reforma de 2013, tanto el Índice de Revalorización Anual de las Pensiones, como el Factor de Sostenibilidad, para evitar el empobrecimiento presente y futuro de las pensionistas.
El propio Gobierno reconoció en la última versión de la Actualización de Programa de Estabilidad 2017-2012, que presentó en Bruselas (aunque trata de silenciarlo en España), las consecuencias de su política de pensiones. Estima que partir de 2019 se producirá una reducción de la cuantía de las nuevas pensiones de jubilación del 4% cada 10 años y de manera acumulativa (es decir, una pensión de jubilación de 1000 euros mensuales no pasará de 960 euros en solo 10 años y así sucesivamente); y que en una década se retrasará en casi 9 meses la edad de jubilación efectiva en España, siendo ya una de las más altas de la UE (con 64,1 años).
A esto hay que sumar, la pérdida de poder adquisitivo que sufrirán los pensionistas a tenor del Índice de Revalorización Anual de las Pensiones ideado por el Gobierno, para evitar que las pensiones se revaloricen conforme al IPC (el incremento de pensiones del 0,25% anual o como mucho del 0,5% quedará muy por debajo del coste de la vida), lo que producirá un grave y creciente empobrecimiento de los pensionistas a lo largo de su vida (conviene recordar que la pensión media se sitúa en 918 euros mensuales).
Al Gobierno no parece interesarle el daño que se produce en la equidad intergeneracional al percibir los jubilados pensiones mucho más bajas que los que les preceden.
Todo esto hace que el gasto en pensiones apenas varíe en las próximas décadas, a pesar de que se prevé que el número de pensionistas aumente en más de 6 millones. En 2013, el gasto en pensiones fue del 11,8% del PIB; en 2050 será ligeramente superior (12,3%) y a partir de entonces y hasta 2060, volverá a descender al 11% del PIB, según las propias estimaciones del Gobierno.
De mantenerse esta reforma nuestro actual sistema público de pensiones se convertirá en un modelo de pensiones de indigencia, sin ningún encaje constitucional.
Movilizaciones de los pensionistas del 30 al 9 de octubre
Los jubilados y pensionistas de UGT y CCOO han convocado una movilización en forma de marchas, que se desarrollarán del 30 de septiembre al 9 de octubre, desde distintos puntos de España y que confluirán en Madrid. El objetivo es para denunciar la nefasta gestión en materia de pensiones del Ejecutivo, la situación de bloqueo y parálisis del Pacto de Toledo y del diálogo social y para demandar unas pensiones dignas presentes y futuras (que se vuelvan a revalorizar conforme al coste de la vida para que no pierdan poder adquisitivo).
Las movilizaciones “En marcha por pensiones dignas”, tendrán un fuerte contenido social y serán respaldadas por distintas organizaciones sociales, pues la situación de las pensiones nos afecta a todos.