La cumbre UE-CELAC decepciona a trabajadores y trabajadoras

La declaración final no contiene referencias relevantes sobre el mundo del trabajo

La cumbre UE-CELAC, celebrada durante los días 17 y 18 de julio, reunió a las máximas autoridades de la Unión Europea y a jefes de Estado y de gobierno de la UE y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), espacio de participación intergubernamental para la integración y desarrollo de los países de Latinoamérica y el Caribe. 

La declaración final de la cumbre (acordada entre las delegaciones participantes con la excepción de Nicaragua) incluye algunas cuestiones políticas relevantes, como el apoyo a la paz total en Colombia, un nuevo paso respecto del fin del intervencionismo político y económico sobre Venezuela, la condena al acoso a Cuba a través del bloqueo y de normas ad-hoc para imponer sanciones unilaterales por parte del gobierno de Estados Unidos y un llamamiento para la revitalización democrática del multilateralismo y sus instituciones, entre otros temas. Asimismo, la Unión General de Trabajadoras y Trabajadores quiere destacar el compromiso expresado frente a las múltiples violencias y discriminaciones que sufren las mujeres y a la importancia dada a la lucha contra el cambio climático y sus efectos. 

Sin embargo, el documento es sumamente decepcionante respecto de algunas de las principales demandas y necesidades de los trabajadores y trabajadoras que las organizaciones sindicales expresaron en un texto conjunto de la Confederación Europea de Sindicatos (CES) y la Confederación Sindical de las Américas (CSA). La declaración asumida por los jefes de Estado y de gobierno no sólo no integra ninguna de las demandas expresadas por las confederaciones sindicales regionales (como el respeto de los derechos sindicales, la promoción de normas vinculantes sobre la responsabilidad de las empresas transnacionales en las cadenas globales de valor o el impulso del diálogo social a nivel nacional y regional), sino que omite casi al completo referencia alguna sobre los intereses y necesidades de las trabajadoras y trabajadores y del mundo del trabajo (de hecho las palabras “trabajadora” o “trabajador” no aparecen en sus páginas). 

Otra oportunidad perdida

Este documento , que sólo incluye una referencia notoriamente genérica y débil a "promover los principios y derechos laborales fundamentales y las normas y convenios laborales esenciales de la OIT", no sólo oculta la importancia de la realidad laboral en ambas regiones y en cuestiones específicas como el cambio climático y la digitalización, sino que también carece de alusiones a algunas de las prioridades sociales de la clase trabajadora en la coyuntura actual, como la pérdida de poder adquisitivo, la informalidad laboral o la protección social. 

Pese a que UGT es consciente de los muy difíciles equilibrios políticos de una cumbre como ésta y de la reiterada desidia (cuando no oposición) de los gobiernos conservadores de algunos Estados en avanzar hacia una convergencia al alza de derechos laborales y sociales, el resultado final supone una oportunidad perdida de alcanzar un compromiso con las demandas de las y los trabajadores en la UE, América Latina y el Caribe, así como en la agenda común. 
 


 

Fuente: UGT