Cristina Antoñanzas ha resaltado que el sector tecnológico es un nicho de empleo del que las mujeres no pueden quedar excluidas

La Vicesecretaria General de UGT, Cristina Antoñanzas, ha participado en las jornadas “El futuro del empleo a debate: nuevos desafíos para el Diálogo Social y la Negociación Colectiva en un mundo laboral digitalizado” organizadas por UGT-Murcia.

En su intervención, Cristina Antoñanzas ha analizado la situación de la brecha de género en el ámbito laboral y ha destacado que la brecha de género existente en el sector tecnológico reviste especial gravedad, “porque es la industria el sector que más empleo neto creará en los próximos años y por la incidencia que el desarrollo tecnológico tiene sobre el modo en que nos informamos, comunicamos y entretenemos”.

Antoñanzas ha explicado que “en un mundo tecnológico cada vez más transversal, la tecnología adquiere una relevancia creciente y lo hace en una doble vertiente: por un lado, las sociedades se digitalizan a un ritmo vertiginoso, permitiendo hablar de una 4ª revolución industrial. Lo digital inunda todos los ámbitos de la vida: institucional, académico, profesional, incluso en las relaciones personales, y está suponiendo una transformación profunda en todos los aspectos. Por otro lado, supone un nicho de empleo y negocio específico y creciente que ofrece múltiples oportunidades y para el que debe aprovecharse el cien por cien del talento disponible”.

“Sin embargo, los datos alertan de la escasa presencia de mujeres en el ámbito tecnológico, no solo en lo profesional sino también en la adquisición de habilidades digitales que devienen imprescindibles, además de para el ámbito laboral, para el pleno desarrollo personal y social” ha advertido.

“Por eso, la búsqueda de soluciones a la brecha de género digital requiere un enfoque múltiple que englobe todas las realidades de la sociedad digital como el emprendimiento, las plataformas digitales o las nuevas carreras profesionales y las diferentes administraciones públicas deben activar las medidas necesarias con el fin de corregir los déficits y barreras que dificultan la igualdad en el acceso y en el reparto de los beneficios de la digitalización”.

Cristina Antoñanzas ha recalcado que las causas de la brecha digital de género son múltiples y, por consiguiente, las medidas deben abordar diferentes ámbitos: el sistema educativo desde la niñez hasta la edad adulta, el mercado laboral, la conciliación entre la vida profesional y la vida privada, los servicios públicos y la brecha digital en general”.

Luchar contra los estereotipos

“Es primordial garantizar la alfabetización digital y la educación para todos, prestando especial atención a las niñas, a fin de eliminar desde la raíz la brecha digital de género y superar estereotipos, y a fin de prevenir la exclusión de las mujeres del mercado laboral, es necesario alentarlas a que participen en empleos técnicos y de alto nivel, superando las barreras y los estereotipos educativos y profesionales y garantizando el aprendizaje digital permanente” ha añadido.

La Vicesecretaria General de UGT ha señalado que “todas las políticas a nivel nacional, europeo e internacional deben tener en cuenta la discriminación contra las mujeres en el ámbito digital, que también tiene consecuencias negativas en la economía y la sociedad en general, por ello UGT exige el cumplimiento del artículo 28 de la Sociedad de la Información de la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo, para la igualdad efectiva de mujeres y hombres”.

“La valoración de puestos de trabajo contenida en el Real Decreto 902/2020, de 13 de octubre, de igualdad retributiva entre mujeres y hombres y que debe llevarse a cabo en todos los Convenios Colectivos y en todos los Planes de Igualdad, son una oportunidad para conocer y mejorar las competencias digitales de las mujeres trabajadoras” ha subrayado.

Además, las estadísticas nacionales deben analizar las competencias digitales requeridas en los distintos sectores de producción y facilitar información sobre las mismas puesto que la brecha digital de género en el empleo no se corresponde con la brecha digital al uso personal”.