Los datos de IPC correspondiente al mes de noviembre registran una tasa anual del 6,8%, medio punto menos que el mes anterior y la cifra más baja desde enero. Sin embargo, la tasa subyacente, que refleja la inflación de componente estructural, se ha elevado una décima, hasta alcanzar el 6,3%

Ya es el cuarto mes consecutivo en el que la tasa general ralentiza su crecimiento, lo que se debe, principalmente, al comportamiento del precio de la electricidad observado a partir de agosto, que se ha reducido a raíz de la introducción de medidas para topar el precio del gas y rebajar la factura eléctrica. Una política que, para UGT, pone de relevancia la manera en que los mecanismos de control de precios resultan efectivos para reducir los mismos y beneficiar con ello al conjunto de la ciudadanía.

No obstante, el hecho de que la inflación subyacente siga alcanzando cotas elevadas consolida la persistencia del efecto contagio, ya que, a pesar del abaratamiento energético, continúa la presión al alza sobre el resto de bienes y servicios básicos para los hogares españoles. Así, muchas grandes empresas están aprovechando la situación actual para elevar los márgenes de beneficio, impulsándola espiral de precios a máximos históricos y empobreciendo al conjunto de los trabajadores y trabajadoras.

Por ello, UGT reclama al Gobierno la implementación de medidas que regulen y penalicen la dinámica especulativa de estas empresas. Además, la patronal debe tener altura de miras y comprometerse a alcanzar un acuerdo global que reparta de manera justa los costes de la inflación, moderando la acumulación desproporcionada de beneficios y estableciendo subidas salariales que no atenten contra el poder de compra de la población trabajadoras.

El sindicato recuerda que la actividad productiva de las empresas depende de la capacidad de consumo de las familias, por lo que continuar ahogando su presupuesto ralentizará la demanda, como ya reflejan los últimos datos de la Contabilidad Nacional, lo que puede poner en peligro la solidez del crecimiento económico y de la creación de empleo, alimentando aún más los niveles de desigualdad y pobreza ya existentes en nuestro país.

Datos de interés

La tasa interanual del IPC ha alcanzado en noviembre el 6,8%, medio punto menos respecto al dato del mes anterior, situando la inflación media en lo que va de año en un 8,6%. Por su parte, la tasa mensual de inflación disminuye una décima respecto al mes de octubre.

En este comportamiento destaca, principalmente, la bajada de precio del transporte y la electricidad que, pese a mantenerse en valores elevados, se abarata un 22,4% respecto a noviembre del año pasado. 

No obstante, la inflación subyacente, que no tiene en cuenta los productos energéticos y los alimentos no elaborados, incrementa una décima su tasa anual, hasta el 6,3%, solo cinco décimas por debajo del IPC general. Un dato que confirma la consolidación de la inflación como un fenómeno estructural, lo que reclama medidas contundentes para proteger el bolsillo de la clase trabajadora.