No se puede rebajar la protección de las personas trabajadoras especialmente sensibles a la infección por SARS-CoV-2
Fecha: 08 Oct 2020
UGT advierte de que los cambios en el procedimiento de actuación frente a la exposición al COVID no garantizan la seguridad y salud de los trabajadores vulnerables en esta segunda ola de la pandemia
La Unión General de Trabajadores muestra su desacuerdo con la nueva actualización del “Procedimiento de actuación para los servicios de prevención de riesgos laborales frente a la exposición al SARS‐CoV‐2” realizada por el Ministerio de Sanidad para adecuarlo a los cambios en la Estrategia de detección precoz, vigilancia y control de COVID-19, fundamentalmente en lo referido a la duración de la cuarentena y a las pruebas diagnósticas de infección activa.
Para el sindicato estos cambios mantienen desamparados a las personas trabajadoras y en particular a los especialmente sensibles frente a la infección por SARS-CoV-2 ya que no se han modificado los anexos IV y V del procedimiento, dirigidos a la gestión preventiva en cuanto a la consideración de trabajadores especialmente sensibles como ha venido reivindicando UGT.
UGT considera que los criterios incluidos en dichos anexos no garantizan la protección efectiva de la seguridad y salud de las personas trabajadoras vulnerables en esta segunda ola, tal y como marca la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. Por ello, insiste en reclamar la eliminación de los ejemplos incluidos en la “Tabla 1. Escenarios de riesgo de exposición al coronavirus SARS‐CoV‐2 en el entorno laboral” para cada escenario de riesgo. Estos ejemplos además de inducir a error, están generando un gran malestar entre los trabajadores y trabajadoras de estos colectivos, que se ven reflejados de forma inadecuada en una u otra columna de la tabla, provocando que se sientan desprotegidos y que se les da una menor protección que al resto de las personas trabajadoras.
El sindicato tampoco comparte el hecho de que para los casos confirmados para COVID-19 no sea necesario la realización de una PCR para levantar el aislamiento ni para reincorporarse a la actividad laboral.
Además, considera que se rebaja la protección de los profesionales sanitarios y socio-sanitarios, ya que estos colectivos podrán reincorporarse a su puesto de trabajo con una PCR positiva pero con baja carga viral, lo que implica que, sin estar totalmente sanas, deben reincorporarse a su puesto de trabajo, con los riesgos que esto conlleva, y atender a otras personas, muchos de ellos enfermos y ancianos cuya salud está debilitada pudiendo sufrir graves consecuencias si llegasen a contagiarse.