Nuestro país no puede entenderse sin los flujos migratorios
Fecha: 15 Dic 2022
Cristina Antoñanzas manifiesta que los datos oficiales combaten los estereotipos y falsos bulos sobre las personas migrantes
La Vicesecretaria General de UGT, Cristina Antoñanzas, la Secretaría de Políticas Sociales de UGT-Castilla y Léon, Victoria Zumalacárregui, y la responsable del Área de Migraciones de UGT Confederal, Ana Mª Corral, entre otros, han presentado, en rueda de prensa, el informe “Desmontando prejuicios y estereotipos. Población de nacionalidad extranjera en Castilla y León”. Y han participado en un taller en el marco del proyecto #TrabajoLibreDeBulos.
Antoñanzas ha señalado que este taller, que se ha impartido en distintas Comunidades Autónomas y a través de las Redes Sociales, desmonta cuestiones como que las personas migrantes son las que más utilizan los servicios sociales, la sanidad, o las que más reciben el Ingreso Mínimo o la Renta Mínima de Inserción. “Cuestiones de las que se habla sin conocer la realidad”. En este sentido, ha manifestado que de las más de 16 millones de consultas médicas que recibió el Sistema Nacional de Salud, solo el 11% fueron realizadas por personas con nacionalidad extranjera y del total de usuarios que utilizaron los servicios sociales, solo el 5,2% eran extranjeros. También ha recordado que solo el 0,7% de todas las pensiones que se pagan en nuestro país la reciben personas con nacionalidad extranjera.
Asimismo, ha señalado que la población que tiene su origen en un movimiento migratorio, en España, alcanza el 16,9% de la población total, alrededor de 8 millones de personas, y que la migración que recibe España se haya, sobre todo, en el intervalo de población activa. Es decir, la gran mayoría de las personas que vienen a nuestro país es para trabajar y para ganarse la vida dignamente, además contribuyen a combatir el saldo vegetativo negativo de la población española (que se da cuando hay más defunciones que nacimientos).
Escasez de personas trabajadoras migrantes en Castilla y León
Los datos también reflejan que en aquellas Comunidades Autónomas o provincias donde hay menos oportunidades laborales y menos servicios, hay más pérdida de población, incluida las personas trabajadoras migrantes. Así, León es la segunda provincia de Castilla y León, solo por detrás de Zamora, con el porcentaje más bajo de población extranjera (un 4,5% del total de la población). Asimismo, Castilla y León es una de las Comunidades donde hay más personas mayores, con más de 65 años.
En definitiva, los flujos migratorios y las personas migrantes lejos de perjudicar a nuestro país son fundamentales, aportan diversidad, rejuvenecen la población y facilitan el crecimiento económico y el sostenimiento de nuestro Estado de Bienestar.