Jesús Gallego, el secretario de Relaciones Internacionales de UGT, ha intervenido en el debate sobre la Carta de valores con una comparecencia que ponía en valor este documento, destacando su relevancia en la coyuntura actual a nivel internacional. En el capítulo 3 del Programa de Acción: Juntas y juntos por una economía para las personas y el planeta han intervenido también representantes sindicales de UGT. Por un lado, el vicesecretario general de Política Sindical, Fernando Luján, que ha hablado de la importancia de una transición justa y verde a nivel global; y por el otro, Paula Ruíz, coordinadora de UTC-UGT y vicepresidenta de EUROCADRES. 

Carta de Valores de la CES en la búsqueda de la paz, el respeto y la democracia

Durante el debate sobre la propuesta de resolución de una Carta de Valores de la CES, el secretario de Relaciones Internacionales de UGT, Jesús Gallego, ha considerado que esta resolución es “una propuesta necesaria y que llega justo a tiempo para los momentos que estamos viviendo, porque incluye todos los elementos esenciales para, a partir de un sindicalismo autónomo y solidario, construir un programa social y político en torno a la búsqueda de la paz, el respeto y el perfeccionamiento de la democracia y el estado de derecho, la defensa del proyecto europeo para todos y todas, el impulso a un modelo económico justo socialmente y sostenible medioambientalmente, y la búsqueda de mayores niveles de igualdad, entre otras prioridades”. 

“En la construcción de una propuesta sindical para una sociedad europea democrática, pacífica y justa no puede haber lugar para aquellos que discriminan a las personas más vulnerables a partir de discursos excluyentes”, ha manifestado. “Es necesario reforzar algunos de los principios y valores más básicos con los que conseguimos una experiencia, modelo de integración y progreso en Europa”.

Todo ello bajo el paraguas de la acción conjunta. “Somos mejores, que somos más efectivos, cuando los sindicatos trabajamos de manera conjunta. Unidos somos el único escudo que tenemos los y las trabajadoras. Unidos cementamos, vertebramos Europa, la Europa que tiene que protegerse de las amenazas a su integridad y sus libertades”.

Una Europa más fuerte y socialmente justa

Fernando Luján ha intervenido en el capítulo 3 del Programa de Acción Juntas y juntos por una economía para las personas y el planeta, también presidido por Pepe Álvarez. En su comparecencia, Luján ha recordado que las crisis también pueden suponer grandes oportunidades. Por eso, ha planteado que es necesaria una “transición justa y verde que afronte el desafío climático, tecnológico y demográfico a través de la protección de las personas trabajadoras", abogando por una "política industrial europea fuerte que sea capaz de revertir la dependencia energética y tecnológica”.

En este sentido, Luján ha reclamado a la Unión Europea que “invierta masivamente en los sistemas energéticos domésticos para reforzar la autonomía estratégica del conjunto de Europa. Y ello con protección del trabajo, dando respuesta a las nuevas formas de prestar servicios, a la protección de las personas trabajadoras en las cadenas de subcontratación y garantizando que la respuesta a los retos no deje a nadie atrás”. 

El Vicesecretario General de Política Sindical ha criticado la imposición de "medidas irracionales como el austericidio, que eran injustas contra las personas y contraproducentes para la economía y la democracia", sentenciando que "La mal llamada austeridad además profundizó y agravó las crisis de muchas economías, especialmente las mediterráneas".

En su crítica a las medidas austeras, Fernando Luján ha recalcado la importancia de una transición justa desde la consciencia de que el planeta es uno, no tenemos dos. Da terminado su intervención con una declaración clara: "El verdadero crecimiento no es acumular más beneficios, sino repartir mucho mejor, porque planeta solo tenemos uno". 

Más formación profesional para la nueva realidad laboral

En este capítulo también ha intervenido la coordinadora de UTC-UGT y vicepresidenta de Eurocadres, Paula Ruiz, que ha señalado que, “a pesar del aumento de la proporción de ciudadanas y ciudadanos europeos que completan estudios de tercer nivel, los cambios a los que nos enfrentamos en el lugar de trabajo exigen un reciclaje frecuente de todas y todos los empleados, incluido el personal profesional y directivo”.

De esta forma, “este derecho vinculante a la formación debe estar guiado por las necesidades de la mano de obra. La formación debe tener lugar durante las horas de trabajo, y la carga financiera no debe recaer en las y los trabajadores titulados y cualificados. Este derecho debe aplicarse para apoyar un enfoque de aprendizaje permanente, que abarque todas las competencias, desde la formación básica hasta módulos educativos más largos, y debe aplicarse desde el inicio del empleo”.

Para Paula Ruiz, sin este derecho, “dejamos atrás a la clase trabajadora, corremos el riesgo de aumentar el déficit de cualificaciones, aumentar la probabilidad de pérdida de puestos de trabajo, reducir la rentabilidad de las empresas y hacer que Europa sea menos innovadora”.