Trump se despide con una nueva agresión a Cuba
Fecha: 11 Ene 2021
UGT quiere enviar su apoyo y solidaridad a los y las trabajadoras de Cuba
La declaración del gobierno saliente de Estados Unidos de ayer, 11 de enero, que incluye a Cuba en la nómina de los gobiernos “patrocinadores del terrorismo”, es una clara evidencia de que, por un lado, Donal Trump continúa dispuesto a atacar y extorsionar a todos los gobiernos que no se alineen con su capricho y, por otro, que a escasos nueve días de la toma de posesión del próximo presidente, el mandatario ultraderechista continúa gobernando.
El Departamento de Estado norteamericano anunció a través de su máximo responsable, Mike Pompeo, que Cuba volverá a la arbitraria lista estadounidense que incluye países que supuestamente patrocinan el terrorismo. En el caso cubano, el gobierno de Trump alega el apoyo del gobierno de la isla caribeña, al gobierno de Venezuela, otro de los países blanco del intervencionismo internacional durante toda la gestión de Donald Trump.
Tal vez haya que encuadrar este nuevo ataque a Cuba en los últimos acontecimientos sucedidos en Washington, y que el gobierno de EEUU quiera insistir en su línea política más intervencionista y unilateral disfrazándola de interés democrático, justo cuando ha quedado patente la incapacidad del gobierno de Trump a la hora de dar lecciones de democracia o de lucha contra el terrorismo a ningún país del mundo: aún colean las imágenes de grupos ultraderechistas fuertemente armados, asaltando la sede de instituciones democráticas, exigiendo la imposición de su programa, por la fuerza, alentados por el presidente saliente del país.
En este contexto, la Unión General de Trabajadores quiere enviar su apoyo y solidaridad a los y las trabajadoras de Cuba, a nuestra organización sindical hermana en aquel país, la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y al conjunto del pueblo cubano, perennemente hostigado, vilipendiado y maltratado por un ultraderechista dispuesto a disparar todas sus balas en sus últimos días en el cargo y que, lejos de cejar, se ha agravado en los últimos meses, como demuestra el endurecimiento del ilegal bloqueo a la isla en plena pandemia causada por el COVID-19.
Este tipo de medidas vuelve a recordar la peligrosidad de asumir la agenda norteamericana en política exterior y la necesidad de que tanto España como la Unión Europea tengan posiciones autónomas, alejadas del intervencionismo y basadas en el respeto a la soberanía de los Estados, por lo que confiamos en que el gobierno de España y la Unión Europea demuestren una firme posición contraria contra las decisiones arbitrarias e intervencionistas del gobierno de Estados Unidos y que promuevan, tras la inminente asunción de la gestión de Joe Biden, una agenda de respeto por la soberanía política y económica en todos los países de del mundo.