Este nuevo ataque antisemita se suma a las gravísimas afirmaciones y proclamas antisemitas que se vertieron el pasado sábado 13 de febrero en Madrid, durante una manifestación fascista en la que se rendía tributo a la División Azul, como denunció UGT, así como el ataque que el cementerio judío de Madrid sufriera a finales de diciembre del pasado año, en donde se pintaron frases en las que se amenazaba a la comunidad judía. Estos actos cobardes y constitutivos de delito de odio no pueden tolerarse y nadie puede permanecer en silencio ante ellos.

Una vez más, todo apunta a una organización fascista, habida cuenta de los símbolos supremacistas dejados en la puerta del cementerio de Hoyo de Manzanares y esta vez suman, además, insultos que incitan al odio a Marruecos, por lo que UGT considera que los ataques están relacionados con la crisis desatada en la frontera ceutí y la tormenta política que la extrema derecha política y mediática de nuestro país ha levantado en torno a la masiva entrada de personas migrantes en Ceuta.

Hace poco observábamos con horror como parte de la derecha justificaba, e incluso se regodeaba, con el número de víctimas mortales en Gaza. Hoy, estos mismos herederos del nazismo y del fascismo, son la mano que profana un cementerio judío, demostrando, pese a que con frecuencia se hacen llamar “amigos del pueblo de Israel” que cualquier persona está en su punto de mira y que todos y todas somos potenciales objetivos de su odio.

La normalización del fascismo y del nazismo que se está produciendo en España es cada día más preocupante, y es responsabilidad de la derecha y de la izquierda, de todas las personas, organizaciones, instituciones y de todos los sectores de la sociedad denunciarla y luchar por el aislamiento y persecución legal de estos grupos, de manera que la legitimación de su desprecio a los derechos humanos desaparezca de una sociedad que apuesta por la convivencia pacífica y la democracia. Si un encomiable acierto de España, como ha sido prestar atención médica por motivos humanitarios, es respondido con antisemitismo y odio a Marruecos, debe animar a cualquier persona o fuerza que se tenga por demócrata a saber en qué lado debe colocarse.