El sindicato considera inaceptables las continuas y exageradas subidas de la luz

•    En los ocho primeros meses del año, el incremento en el precio de la luz ha sido de casi el 30%. Es inasumible la predicción del Gobierno de un aumento añadido del 25% en lo que resta de año.

•    UGT considera imprescindible acabar con el oligopolio privado de las eléctricas, que está afectando de manera más virulenta a los colectivos más vulnerables.

La Unión General de Trabajadoras y Trabajadores considera inasumibles e insostenibles las continuas subidas del precio de la electricidad de los últimos meses, que afectan, en mayor medida, a los colectivos más vulnerables. Son muchos los pensionistas, unidades familiares con menores, autónomos, comercios y pymes que no podrán asumir el elevado coste de las facturas.

Día tras día, nos despertamos alarmados por el abusivo encarecimiento del precio de la luz. Estamos asumiendo las tarifas más altas de la historia, a pesar dela rebaja del IVA que aprobó el Gobierno con carácter temporal. En los ocho meses que va de año el incremento ha sido del 29,5%, llegando al pico de los 140 euros en el megavatio/hora. En agosto se ha producido un incremento del 46% interanual y del 9,1% respecto al mes anterior. En este contexto, para UGT es inasumible la predicción del Gobierno de que el resto del año subirá un 25%.

La ola de calor que hemos sufrido en el mes de agosto ha disparado el consumo de electricidad, que unido a la continua subida de los precios, ha obligado a la mayoría de las familias a destinar el 5% de sus ingresos a pagar los recibos de luz, agua y gas, pero también ha provocado que muchos hogares no puedan pagar sus facturas, incrementando los índices de pobreza energética.

Es imprescindible acabar con el oligopolio privado de las eléctricas

Para UGT, este escenario pone más de manifiesto que nunca la necesidad de impulsar un Pacto de Estado de la energía que termine con el mercado marginalista y especulativo, coloque a los consumidores en el centro, y acabe con la volatilidad de los precios y que no sea la última energía consumida la que fije el coste; creando un nuevo modelo energético que garantice un sistema de precios más justo y transparente; acabando con el oligopolio privado de las eléctricas, corrigiendo el error de su liberalización en los 90, impulsando una empresa pública de energía que garantice el interés general y aporte mayor competitividad a las empresas; investigando y sancionando a las comercializadoras que manipulen la fijación de precios inflando las facturas; y nacionalizando los servicios públicos esenciales (electricidad, agua y gas natural).

Además, el sindicato considera imprescindible revisar el nuevo sistema de tramos horarios, que no coinciden con ninguno de los tramos anteriores utilizados para las tarifas con discriminación horaria, y que sitúa las tarifas más caras en las horas centrales del día, teniendo en cuenta las nuevas realidades como son el teletrabajo y la educación a distancia; reformar el bono social, para que llegue a todos los que lo necesitan, y en la cuantía suficiente, ya que ser beneficiario del mismo no garantiza a las familias que puedan asumir el coste de las facturas; y prohibir los cortes de suministros esenciales como electricidad, agua y gas, de forma permanente, y subir el Salario Mínimo Interprofesional.

Los indicadores sociales reflejan que los sectores más vulnerables continúan en riesgo de afectación ante la incertidumbre sobre la evolución de la pandemia, por lo que UGT considera necesario reforzar el bienestar social.

El Gobierno debe actuar ya contra las exageradas subidas de precios de la luz

UGT valora las declaraciones de la Vicepresidenta Tercera y Ministra para la Transición Ecológica esta misma semana, en las que el Gobierno muestra su compromiso de crear una Comisión Parlamentaria para el estudio del precio de la electricidad y las mejoras del funcionamiento del sistema eléctrico. Teresa Ribera se excusó en el cumplimiento de la normativa constitucional y europea, pero el sindicato considera que existen márgenes que permiten introducir algunos cambios. 

En este sentido, el sindicato considera que la medida que finaliza el próximo 31 de octubre de bajada de impuestos (IVA e impuesto a la generación eléctrica), es un parche por su carácter temporal, ya que se debería prorrogar hasta que se lleve a cabo la revisión de la fiscalidad energética, para darle un carácter permanente, y a su vez, complementarla con el incremento de impuestos a los que más tienen.

La Ministra también declaró que se tomarán medidas estructurales y coyunturales, pero no estableció plazos para el impacto en la factura. Para UGT es necesario establecer plazos y actuar ya frente a las continuas y exageradas subidas de los precios, que afecta especialmente a las economías más vulnerables (principalmente pensionistas y familias con hijos a cargo o con personas dependientes), a las pymes, a los pequeños comercios, y a los autónomos, sobretodo, teniendo en cuenta que el 45 % de los hogares ha sufrido una pérdida de ingresos durante el año pasado.