UGT defiende mejores trabajos para una recuperación más eficaz
Fecha: 26 Jul 2020
Hay que derogar la reforma laboral y construir un nuevo marco de relaciones laborales
• Advierte sobre la utilización de la contratación a tiempo parcial de manera abusiva, sobre todo en el caso de las mujeres, para esconder un fraude en relación a las horas efectivas de trabajo.
• Hay que desechar el modelo de subcontratación que solo busca el ahorro de costes y no ganar en especialización.
• UGT reclama avanzar hacia la racionalización de horarios y favorecer la corresponsabilidad.
• Demanda luchar contra la discriminación y contra el fraude laboral, que últimamente se extiende a través de los falsos autónomos y los falsos becarios tras la expansión de las nuevas tecnologías.
La Unión General de Trabajadores reclama que uno de los pilares fundamentales de la necesaria reconstrucción social y económica de nuestro país sea la creación de empleos dignos, estables y de calidad. Construir un marco de relaciones laborales capaz de ofrecer estabilidad es, por tanto, una cuestión estratégica para mejorar las condiciones de trabajo de la población asalariada, pero también para la economía del país.
En este sentido, para el sindicato es fundamental derogar la reforma laboral de 2012, con el objetivo de equilibrar las relaciones laborales y evitar la facilidad del despido para las empresas. En este sentido, resulta imprescindible fortalecer la causalidad de la contratación temporal, precisar mejor las modalidades de contratos temporales existentes y desincentivar que las empresas cometan fraude en la contratación incrementando las sanciones y reforzando las garantías de las perso¬nas trabajadoras.
Además, el marco de relaciones laborales debe contemplar instrumentos que po¬sibiliten el ajuste interno en las empresas, que necesariamente deberán ser pactados con los trabajadores, para afrontar las posibles crisis que se puedan volver a dar, sea cual sea su calado, sin tener que recurrir a los despidos. En este sentido, UGT resalta el papel fundamental jugado por los ERTE para evitar masivas extinciones de contratos como consecuencia del impacto de la emergencia sanitaria y las medidas adoptadas para frenar la transmisión del virus sobre la actividad económica.
Por otra parte, UGT alerta de que la contratación a tiempo parcial, mayoritariamente involuntaria, se ha incrementado de un modo sustancial durante la última década. La imposibilidad de encontrar un contrato a tiempo completo obliga, principalmente a mujeres traba¬jadoras, a tener que aceptar empleos de pocas horas. Empleos que esconden un fraude importante en relación a las horas efectivas de trabajo y que necesitan de una nueva regulación que suprima las horas complemen¬tarias y limite el tiempo parcial a tres cuartas partes de la jornada ordinaria.
La negociación colectiva, fundamental para mejores empleos y salarios
Las reformas laborales realizadas al margen del diálogo social, en especial la del año 2012, han desequilibrado por completo el poder de negociación entre trabajadores y empresarios, en favor de estos últimos.
Para UGT, resulta fundamental recuperar la ultraactividad y la prevalencia del convenio sectorial sobre el convenio de empresa, así como reducir las capacidades discrecionales del empresario para modificar las condiciones de trabajo. De esta forma, se conseguirá mejorar la calidad de vida de la mayoría social trabajadora, así como para fortalecer la economía del país y las empresas con una vocación de permanencia a largo plazo que basan su competitividad en la inversión, el incremento de la productividad, la generación de valor añadido, la formación y la calidad del empleo.
Por otra parte, los procesos de externalización que realizan tanto empresas como Administraciones Públicas no pueden conllevar una precarización del trabajo. Es necesario establecer un marco que regule las condiciones de empleo de los trabajadores de contratas para desechar un modelo de subcontratación que solo busca el ahorro de costes y no ganar en especialización.
Racionalizar horarios y más corresponsabilidad
El sindicato considera imprescindible que un empleo digno y con derechos contenga la necesidad de avanzar hacia una racionalización de las jornadas laborales y mayores posibilidades de corresponsabilidad.
En este sentido, es fundamental garantizar la desconexión del trabajo y el descanso de las personas tra-bajadoras a través del registro efectivo de la jornada laboral, como así establece la ley, mejorando las formas de recogida de la hora de entrada y salida para evitar los fraudes que actualmente se producen. Debemos avanzar en una desconexión digital efectiva y en el establecimiento de un marco regulatorio del teletrabajo que permita su despliegue con garantías de que se respetan todos los derechos a las personas y favorezca la corresponsabilidad.
Asimismo, para hacer efectivo el cuidado de personas dependientes y la vida profesional, tiene que reconocerse como derecho exigible la adaptación de la jornada laboral y aprobarse una ayuda para las familias que se vean obligadas a reducirse la jornada.
Impedir y perseguir la discriminación y el fraude laboral
La emergencia sanitaria no puede justificar que se produzca ninguna discriminación a las personas trabajadoras relacionada con la salud y, en particular, con la COVID-19. Garantizar la intimidad de las personas, también en lo referente a la salud, es un obli¬gación en una situación en la que se pueden producir discriminaciones, por ejemplo, como se ha sugerido a la hora de introducir en los curriculum vitae información acer¬ca de la inmunidad ante el coronavirus.
Por otra parte, un nuevo marco laboral debe cerrar la puerta a la huida de la labo¬ralidad que se produce a través de los “falsos autónomos” y los “falsos becarios”, que han tenido un importante repunte a la luz de los trabajos emergentes derivados de la aplicación de las nuevas tecnologías –trabajadores en y de plataforma digitales-. Las personas que sufren estos fraudes están situadas al margen de los derechos laborales y, por tanto, en una situación de vulnerabilidad extrema.
Para combatir estos fenómenos, el marco laboral debe reformarse para reconocer la presunción de laboralidad en todos los casos. Además, en relación a la regulación de los autónomos, debe suprimirse la figura del TRADE, en primer lugar, porque favorece este tipo de prácticas, y en segundo lugar por su rotundo fracaso.
Para UGT, es necesario garantizar que estos modelos de negocio respeten la legislación española, también en lo labo¬ral. El sindicato reclama un amplio estudio para conocer la dimensión que alcanza esta nueva forma de trabajar en España. En segun¬do lugar, se debe establecer un registro público en el que las plataformas digitales que operan en España tengan obligatoriamente que registrarse. Y, por último, ha de regularse la transparencia de los algoritmos en los que se basan, así como el uso que hacen de los datos que recopilan.
Además, en relación al sistema de prácticas no laborales, debe reformularse en su totalidad para garantizar su vinculación a un programa formativo, eliminando todas aquellas modalidades que carecen de tal vinculación; asegurar una serie de derechos para las personas que realizan prácticas no laborales; y aumentar el control y las sanciones ante posibles fraudes.
Valoración de Gonzalo Pino, Secretario de Política Sindical de UGT