UGT reclama la puesta en marcha del Pacto Social por la No Discriminación y la Igualdad de Trato asociada al VIH aprobado hace dos años
Fecha: 01 Dic 2020
Demanda que la lucha contra la pandemia no signifique dejar atrás a las personas afectadas por esta enfermedad
• Con motivo del 1 de diciembre, Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, UGT denuncia que este pacto aún no se ha implementado y que la discriminación de las personas VIH aún existe.
• La lucha contra la pandemia no puede significar dejar atrás a este colectivo, ni un nuevo hándicap a la hora de su integración social y laboral.
• UGT reclama garantizar el mantenimiento del puesto de trabajo de las personas con VIH y velar por empleos libres de discriminaciones y donde no se vulneren sus derechos fundamentales.
Con motivo del 1 de diciembre, Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, la Unión General de Trabajadores reclama la puesta en marcha del Pacto Social por la No Discriminación y la Igualdad de trato Asociada al VIH aprobado hace dos años, ya que, si bien nuestra legislación garantiza la protección de los derechos de las personas con el VIH, este pacto aún no se ha implementado y su discriminación todavía existe.
Para el sindicato, la conmemoración de este día en 2020 ha quedado empañada por la pandemia del Covid-19 y sus consecuencias sanitarias, económicas y sociales. La atención mundial se ha mantenido sobre la pandemia, quedando relegadas, a un segundo plano, otras enfermedades como el VIH.
Esta crisis no sólo está tensando nuestro sistema sanitario, sino también está suponiendo un reto en la protección de los derechos sociales de este colectivo, más allá de las medidas adoptadas para amortiguar los efectos de esta pandemia, en pro del Estado del Bienestar.
La lucha contra la pandemia no puede significar dejar atrás a las personas con VIH
Desde UGT hemos apoyado y participado en el diseño del llamado “escudo social”, ese conjunto de medidas aprobadas para contrarrestar las consecuencias económicas y sociales causadas por el coronavirus y la desprotección de las personas más vulnerables, donde las consecuencias de esta crisis están siendo más evidentes, entre las que se encuentran las personas con VIH.
Para el sindicato, la actual pandemia no puede significar dejar atrás a las personas con VIH, ni un nuevo hándicap en su integración social y laboral. La suspensión de los servicios de atención para el VIH, para priorizar a los casos de la Covid-19, puede tener graves efectos en el estado de salud de las personas afectadas por esta enfermedad.
Además, sus consecuencias y su impacto socioeconómico desigual en la población, y especialmente, en las personas trabajadoras con VIH, aumentan su vulnerabilidad social y laboral, y tiene una incidencia directa en su acceso a un empleo y el mantenimiento del mismo. Los cierres por cese de actividad y las reducciones de plantilla en los centros de trabajo, pueden ser la excusa perfecta para despedir a las personas por su estado seropositivo.
Para UGT, es necesario, más que nunca, no sólo reforzar, sino también ofrecer una protección de sus derechos, entre los que se encuentran el derecho al trabajo; y la libre elección del mismo, en condiciones equitativas y satisfactorias, sin discriminación alguna, a la promoción a través del trabajo, y a igual salario por trabajo de igual valor.
Por ello, el sindicato llama a los poderes públicos a implementar medidas para que el Covid-19 no suponga un riesgo añadido para las personas con VIH y no signifique la voladura de todos los avances conseguidos.
UGT propone
Además, UGT considera imprescindible:
- La implementación de estrategias, por parte de las administraciones públicas, que aborden la discriminación que sufren las personas con VIH, máxime en un momento como el que estamos viviendo, para que no se acabe apartando a estas personas de los espacios de participación social y laboral, y que pueda suponen una pérdida de sus derechos y de su protección social.
- El VIH debe abordarse, en el ámbito laboral, como una cuestión de salud, libre de discriminaciones, y donde no se vulneren los derechos fundamentales de la persona.
- Atender las necesidades de incorporación al mercado laboral, erradicando las discriminaciones en el acceso al empleo.
- Garantizar el mantenimiento del puesto de trabajo.
- Impedir que las promociones internas, rechazos en el puesto de trabajo, despidos, falta de confidencialidad y obligación de realizarse pruebas serológicas, se sigan produciendo en el ámbito laboral.