Jornada sobre políticas de igualdad y no discriminación de las personas con discapacidad en el mercado de trabajo

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El Secretario de Política Sindical de UGT, Gonzalo Pino, ha participado hoy en unas jornadas sobre “Nuevas políticas de igualdad y no discriminación de las personas con discapacidad en el mercado de trabajo, mediante el Diálogo Social y la Negociación Colectiva” donde ha analizado, en una mesa de debate, diversas propuestas para la aplicación de la Negociación Colectiva como herramienta para la integración.

Allí ha señalado que “en 2017, 1.860.600 personas entre los 16 y los 64 años tenían un certificado de discapacidad, lo que representa el 6,2% de la población en edad de trabajar. La tasa de actividad en este colectivo es del 35% (casi 43 puntos por debajo de la población sin discapacidad), la tasa de empleo está en el 25,9% (cerca de 39 puntos menos que la población sin discapacidad) y la tasa de paro en el 26,2%, cuando en 2017, se situaba en 17,1% para la población sin discapacidad”.

 

“Además”, ha destacado, “el 65% de las personas con discapacidad en edad de trabajar son inactivas, concretamente 1.208.800, lo que quiere decir que hay más de 1.200.000 personas con discapacidad que no trabajan, ni van a trabajar, ni tan siquiera se van a apuntar al desempleo”.

 

“Estas son las cifras que hay que cambiar, si queremos hablar de inclusión laboral, igualdad de oportunidades y derechos humanos y para ello es fundamental instar al Gobierno a que impulse el diálogo con las organizaciones empresariales y sindicales en esta materia, algo esencial para que cualquier política dirigida al ámbito laboral sea eficaz” ha añadido.

 

 

Gonzalo Pino ha destacado que “la discapacidad siempre ha estado presente en la agenda sindical y que la Negociación Colectiva ha sido siempre una herramienta para la integración ya que ha favorecido, entre otras cosas, la incorporación al empleo de los trabajadores con discapacidad, la contratación de personas con discapacidad al establecer una cuota de reserva o la posibilidad de realizar ajustes para adaptar los puestos de trabajo o las instalaciones de los centros”.

 

Pino ha advertido que el sindicato no participa en las políticas de discapacidad con los distintos gobiernos porque “no tenemos ningún tipo de participación ni representación institucional en esta materia, ni en las Estrategias y/o en los planes de acción para el empleo de las personas con discapacidad; planes que, sin embargo, debemos aplicar y reivindicar en los convenios y en nuestra acción sindical”.

 

“Por ello, es urgente replantear las políticas de integración sociolaboral de las personas con discapacidad, con el objetivo de disminuir su tasa de desempleo como de inactividad laboral, reactivando las políticas activas de empleo y dirigiéndolas a sus necesidades específicas” ha finalizado.

 

La Secretaria Confederal de UGT, Adela Carrió, que ha intervenido en la clausura de la jornada, ha manifestado que la “inclusión laboral de las personas con discapacidad sigue sin lograrse” por lo que es necesario hacer “un replanteamiento global de todas las políticas dirigidas a este colectivo, en consonancia con la Convención de la ONU sobre Derechos de las Personas con Discapacidad”.

Ha señalado que la discriminación de las personas con discapacidad se hace visible en diferentes momentos de la vida laboral y ha afirmado que hay que lograr disminuir su tasa de desempleo, de inactividad y ganar en la calidad de los empleos.

En el ámbito de la negociación colectiva ha defendido que se establezcan en los convenios compromisos, por parte de las empresas, para emplear a trabajadores con discapacidad. En este sentido, ha dicho que “es una prioridad sindical mejorar la vigilancia del cumplimiento de la cuota de reserva del 2% por parte de las empresas de más de 50 trabajadores” y ha abogado por endurecer las sanciones en caso de incumplimiento de esta cuota.

Carrió ha demandado, además, planes de empresa sobre la discapacidad, para una correcta adaptación al puesto de trabajo en función de la discapacidad de que se trate. El objetivo es que “las trabajadoras y los trabajadores con discapacidad formen parte de las plantillas de nuestras empresas, impulsando el cumplimiento de la cuota de reserva, la adecuación de los puestos de trabajo, el acceso a la formación, y cuantas medidas puedan facilitar su inserción”.